


De las mansiones exuberantes, a los lujosos grandes almacenes, pasando por ser la cuna de los loft, nuevo concepto, acuñado por los artistas que, en la década de los 60, se hicieron con los edificios deshabitados, el barrio neoyorquino de
NoHo* es sinónimo de innovación y creatividad en lo que a habitabilidad se refiere. Dentro de este contexto privilegiado, el brooker recrea con 40 Bond St., un auténtico hogar con forma de loft y con los servicios y comodidades de uno de los mejores hoteles. El edificio, tiene 27 apartamentos, muchos de ellos con terraza, transforma sus plantas bajas en viviendas unifamiliares con jardín privado y entrada propia. De esta manera se recupera un concepto olvidado por la arquitectura llevada a cabo durante los últimos años en el corazón Manhattan.
En 40 Bond St. la estructura de las viviendas juega con la libertad y el espacio que proporciona el loft, manteniendo la ventilación y la luminosidad como sus ejes centrales. Por otro lado, el diseño de los muros exteriores tiene una clara inspiración en el arte urbano del graffiti. Es aquí, en la fachada, donde se detecta la aportación de Cricursa, en cuyo currículo se hallan numerosas referencias de arquitectura singular, tales como la boutique GUCCI (Hong Kong, Nagoya y Nueva York), el Kursaal (San Sebastián) o la boutique Prada (Tokio), en la que también tuvo ocasión de trabajar con el estudio suizo.
La combinación del vidrio y el metal pulido, de acuerdo con Ascan Mergenthaler, socio de Herzog y de Meuron, puede "hacer que la estructura parezca como si se disolviera."

En contraste con esta red, los tipos
disegnaron un ingreso con una celosía de aluminio cuyas exuberantes lineas curvas referencían a los motivos tradicionales de hierro forjado que aunque parecen ser alqo que
Gaudí podría haber imaginado, derivan de placas de graffitis contemporáneos, hibridizados por computadora. Este patrón se repite en los paneles de acero inoxidable que enmarcan la entrada del edificio y en las paredes de madera y Corian que enmarcan el lobby.
* Ian Schrager, el famoso brooker hotelero, que fue tb el dueño de Studio 54 en Manhattan en los años setenta.
* acrónimo de North of Houston Street
No hay comentarios:
Publicar un comentario